A lo largo del extenso y hermoso Parque Natural de la Zona Volcanica de la Garrotxa encontramos el peculiar salto de agua. El Paraje esta un tanto escondido pero no exento de encanto. Es uno de los lugares más visitados de los alrededores de Santa Pau.
Para visitar el salto de agua habrá que dejar el coche en el vecindario de Sallent, cerca del km 10 de la carretera de Olot a Mieres por Santa Pau, donde hay un pequeño espacio para aparcar debajo de unos cipreses. Allí hay que seguir a pie la pista asfaltada que indica la dirección hacia Can Rocacorba todo y que se le cierra el paso con un letrero en fuerte bajada, hasta después de un puente sobre el río Ser. Allí un letrero indica que hay seguir por un bonito y sombreado camino por la izquierda hasta el bonito salto, que encontrará a su derecha, apenas pasado un pequeño puente.
El lugar es sombrío y emboscado, y cuesta creer que un torrente de tan pequeño recorrido pueda llevar en cualquier época del año un caudal de agua tan considerable. Desde Sallent hasta el salto de Can Batlle puede invertir unos 20 minutos.